Con esta canción podemos introducir a los peques en el
mundo de las emociones. Cada vez existe más consciencia en los contextos
educativos de la necesidad de educar en emociones a los niños desde pequeños,
por ello ya se habla de inteligencia emocional para niños.
Esta canción es un excelente recurso, porque vincula la
emoción con las sensaciones en el cuerpo. Lo hace de modo que los niños
aprenden a distinguir cuando sienten una emoción determinada (como el enfado), a través de
distintos signos corporales. Y en la misma línea, también pueden usar su
cuerpo, de una forma muy sencilla, para calmar dicha emoción y equilibrar su reacción o conducta. La letra de la canción es sencilla y la melodía clara, con imágenes que
aportan un mensaje visual fácil de recordar.
Es útil para trabajar las emociones en clases o en casa,
desde una visión cotidiana, natural, sin necesidad que exista serios problemas
de conducta, ya que estas emociones son parte de nuestra naturaleza, solo hay
que aprender a reconocerlas y saber qué hacer con ellas para lo cual, se debe enseñar
desde muy pequeños.